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"La cristalización de mi sueño: Orden Cívica desde forochat, el foro de los chateadores". Alberto Piedrahita Muñoz

Rosa mi madre, y Carlos hermano mayor médico, trajeron a Medellín, abril 1946 la numerosa familia Piedrahita Muñoz de Pácora Caldas, con varios propósitos: el principal la educación de los hermanos menores. A mí me matricularon en la escuela Preparatoria de la UdeA Julio Cesar García, excelente, por cierto. Mis compañeros de escuela me hicieron matoneo, por ser extranjero en Antioquia, “matraca de Pácora”.

Pácora, para entonces, no tenía bachillerato, el mismo que hice en el Liceo Antioqueño, perteneciente a la UdeA. (que plantel educativo del sector público, tan bueno, tan firme y de alto nivel académico). Fui bachiller del tricentenario de la UdeA, tricentenario comprendido (1803 – 1853) junto con dos supernotables de Antioquia, como lo fueron: J Emilio Valderrama Agudelo de Toledo – Ant. y Octavio Arizmendi Posada de Yarumal – Ant. Como caso coincidente, me tocó llevar Arizmendi Posada Ministro entonces de Educación, año 1970, para la aprobación oficial del Colegio de bachillerato de Pácora, denominado Marco Fidel Suarez.

Una vez terminado mi bachillerato en el Liceo Antioqueño de la UdeA, e ingeniería en la Escuela de Minas de la Universidad Nacional, tuve el honor y la gran satisfacción de contar con esos excelentes compañeros de libro, arriba anotados. Valderrama exministro de Estado y tribuno, Arizmendi exgobernador de Antioquia, exministro de educación y escritor de numerosos artículos de nivel internacional sobre educación e historia. Los tres con grandes actividades en Antioquia, en los 16 años del período del frente Nacional. Administraciones de Alberto Lleras Camargo (1958 1962); Guillermo León Valencia (1962 – 1966); Carlos Lleras Restrepo (1966 – 1970); y finalmente, Misael Pastrana Borrero (1970 – 1974).

La residencia inicial de mi familia en Medellín, fue en la calle Caracas con Ladera, sitio muy cercano a lo que hoy es, el teatro Pablo Tobón Uribe. Nos trajeron a residir en una casa grande de tapias de propiedad del afamado pintor Eladio Vélez. Para ir a la escuela Julio Cesar García, tenía que pasar por la calle 52, la Playa, donde estaban ubicando los bronces de los formadores de Antioquia y Medellín, el de Gonzalo Mejía y el Fernando Gomez Martinez, entre otros. Pensé entonces, que con mi estudio y con mis acciones, podría llegar hacer hombre importante en el civismo de Medellín y Antioquia; ese sueño me acompañó por varios años y en desarrollo de mi profesión dentro del cooperativismo, la milicia, la acción comunal y mi partido político el Conservador, tal como sucedió, cuando el grupo Forochat Foro de lo chateadores, que inició el constitucionalista Francisco Zapata, crearon la condecoración cívica: Alberto Piedrahita Muñoz.

Siempre he tenido en mi ruta y hacia el futuro, ser ciudadano de bien, cumplir las reglas y ayudar al prójimo en toda circunstancia, como reza el código scout. A fe que he cumplido tales propósitos en la ingeniería, en el cooperativismo, en la acción comunal, en las corporaciones públicas, en la asociación Scout, Asociaciones profesionales SAI y ADEMINAS y en donde Dios, la vida, la profesión, me han hecho participe. En todos los oficios que me han sido muy satisfactorios, he salido más que gratificado con preseas en el cuello o lucidas en el pecho, que de antemano agradezco.

Mis primeras experiencias las tuve en el bachillerato de la Universidad de Antioquia y en el ejército. Egresé de bachiller en el año 1953 y nos autodenominamos Bachilleres del Sesquicentenario, cuando el Franciscano Fray Rafael de la Serna con cédula real de Fernando Séptimo fundó el colegio de artes y oficios, denominado Colegio Mayor de Antioquia, que con el tiempo fuera la Universidad de Antioquia. En ese entonces, gané el premio Fidel Cano consistente en beca para cursar carrera en una de las facultades de esa Universidad de Antioquia. El premio lo cedí a mi compañero de libro Octavio Arismendi Posada, estudiante con mejores calificaciones que las mías y seguiría derecho en la misma universidad. Mi ingeniería pertenecía a la Universidad Nacional. Al año siguiente hube de prestar servicio militar obligatorio para bachilleres implantado por el general Gustavo Rojas Pinilla, Presidente de facto, presidente de opinión dijo el Tribuno Darío Echandía. El servicio militar obligatorio, lo terminé ocupando el primer puesto entre 900 bachilleres con la medalla José María Córdoba y beca de posgrado en el exterior, la cual utilicé para estudios de cooperativismo en Inglaterra, país donde nació el movimiento solidario y el escultismo, movimientos a los cuales pertenecí en todas las décadas de la segunda mitad del siglo pasado. Con los conocimientos cooperativos adquiridos en Inglaterra, La unión Soviética e Israel pude fundar la Cooperativa de Consumo de Antioquia con gran éxito junto con los ingenieros Guillermo Hincapié Orozco y Víctor Suarez Vásquez, Presidentes SAI.

Siempre con esfuerzos, sin mayor protagonismo y bajo perfil, iba obteniendo preseas en los Scout, en las acciones comunales, en los puestos de ingeniería, en los puestos gubernamentales, en la SAI y en ADEMINAS, de la cual fui cofundador y en donde he obtenido los máximos galardones de los cuales vivo orgulloso.

Hoy Forochat periódico de las redes para participantes inquietos en el intelecto, en el civismo y en la solidaridad que orienta al amigo y constitucionalista, Francisco Zapata, quiso establecer una distinción cívica llamada Alberto Piedrahita Muñoz, distinción que engalana mi nombre y me enorgullece personalmente.

Esta distinción llena las expectativas que desde pequeño he tenido y estimula el libre desarrollo de mi personalidad. Es la misma expectativa, que a mi paso hacía la escuela, iba tejiendo poco a poco.

Tengo la presea José María Córdoba del ejército, la de Gonzalo Mejía de la Alcaldía, prohombre que tuve el honor de conocerlo y admirarlo, la presea de Marco Fidel Suarez del municipio de Bello, la presea José Manuel Taparcua de Ituango, la presea Jorge Robledo de la Asamblea Departamental y otras más, que engalanan los muros de mi biblioteca y ahora Forochat, foro de los chateadores, crean la medalla para el estímuco cívico de los notables antioqueños, con el nombre: Alberto Piedrahita Muñoz.

La solidaridad y el civismo corre en mis venas. Mi abuela Práxedes Osorio, mamá de los pobres en Salamina Caldas, mi madre Rosa benefactora de las iglesias pobres de Medellín y mi sobrina Martha Luz, que acaba de morir y señalada como la madre los ancianos y de los pobres de Puerto Berrio, oficiaron siempre la solidaridad y el civismo.

Todo lo anterior, dentro del marco de la oración Scout que le enseñé a los muchachos de las décadas 50 y 60´s del siglo pasado, dentro del movimiento del cual fui jefe en Antioquia por ocho años:

“Señor Jesús: enséñame a ser generoso,
a servirte como lo mereces,
a dar sin medida,
a trabajar sin descanso
a combatir sin temor a las heridas y,
a sacrificarme sin esperar mayor recompensa que la de saber que hago tu santa voluntad”.

Oración está, que ha guiado mis pasos en Medellín y todo Antioquia.

En Líderes Vecinales Globales, el discurso histórico del doctor Alberto Piedrahita Muñoz recibiendo la Orden Cívica 2018. Imagen Wikipedia